Más de un millar de años han pasado en que el señorío de los Yamparaes, se estableció en este paraje en que hoy habitamos y que los Inkas denominaron posteriormente (a finales del siglo XV) Chquechaca: ouente de oro. Años después, en 1538 ariibaron los conquistadores españoles guiados por los Kurakas de Charcas que poco antes, en Auquimarca, habían aceptado ser vasallos del rey de España. Se estableció así la Villa de Charcas.
Las crónicas d ela época, relatan las épicas luchas de los platenses hispanos e indios en las guerras civiles. Gracias a su valor y entrega, la Villa, poco después ciudad de La Plata, recibió el título de "muy noble, muy ilustre y muy leal".