520 |
|
El tema del celibato eclesiástico proyecta una sombra sobre la vida de la Iglesia boliviana (desde el Concilio Vaticano II, también sobre la Iglesia universal); pero en unos términos ambiguos, generalmente implícitos, con altas dosis de condicionamientos poco recomendables; aun si, no puede negarse que ha sido siempre (desde la época de Herrero) algo así como una “fantasma omnipresenteâ€. Me referiré solamente a dos manifestaciones publicas. La primera publicación de un folleto, de portada inequívoca: Abolición de la ley del celibato eclesiástico y la segunda tan posterior a la intervención de Herrero como la que acabamos de ver, esta en cambio muy cercana de ella, por no decir que esta íntimamente emparentada: todo lo que rodeo a aparición del denominado “Comité Coreaâ€(1930-1931).^ies |