Marc 21

001 17656
003 BAHAALP
005 21102020153913
006 $m 21102020153913
082 808.83
090 B748a
100 Botelho Gosalvez, Raul
$q Raul Botelho Gosalvez
245 Altiplano
250 7a. ed.
$b Incluye portada
260 La Paz - Bolivia : Juventud; 1982.
$a La Paz - Bolivia
$b Juventud
$c 1982
300 171 p. 18 cm.
$a 171 p.
$c 18 cm
490 Colección Ramón Rocha Monroy
500 $3 1
520
Altiplano ha sido tradicionalmente hermanada con El mundo es ancho y ajeno, de Ciro Alegría: su temática, orientación, período y momento en que fueron escritas, son motivos para esto.  Posiblemente el término que mejor sintetiza a Altiplano es viaje, (diáspora) en tanto conlleva el dinamismo que la obra de Botelho ofrece. La comunidad Jatun-Kolla, un ayllu tranquilo, en el que si bien existen diferencias económico-sociales —pobres y ricos, notables y pueblo— y la vida es difícil, ofrece una existencia armónica y bien organizada.  La tranquilidad, sin embargo, se ve perturbada por un juicio de expropiación: el doctor Las Casas —apellido por demás significativo, que inmediatamente se asocia y contrasta con la actitud del fraile defensor— presenta ante las autoridades documentos ilegales que lo nombran propietario de la tierra.  Esta maniobra tenía el objetivo de adueñarse de una buena zona de cultivo y con ella de labriegos que la trabajasen.  Al éxodo que resulta del despojo, se le añade una larga sequía, que afecta a todos.  A las historias de tres familias se les da particular atención, en tanto pertenecen a tres “castas” dentro de la comunidad: los acomodados (los Villca), los trabajadores “pequeño burgueses” (los Huanca), y los pobres (los Condori) (Botelho 30).  Con la sequía, y en vistas de la dificultad de subsistir, desoyendo los consejos de los ancianos, que no se alejen del pueblo, estos tres personajes (con sus familias) se marchan.  Los destinos de cada uno, si bien aparentemente distintos (en la ciudad, la selva, trabajando el tabaco, y la mina, respectivamente) no lo son tanto.  En los tres casos, encaran un futuro más negro que en la propia comuna, uno que empeora día a día a causa no sólo de la injusticia con la que se enfrentan, sino por el tipo de trabajo que deben realizar.
Quizás el caso de Vicente Villca, quien va a acogerse en la casa de su comadre, una chola de la ciudad, quien les cobra en forma sideral por su bienvenida, es de destacar.  Villca, en la comuna, pertenecía a “la burguesía usurpadora y orgullosa de su riqueza” (Botelho 29-30).  En la ciudad, el ser de otro lugar es lo mínimo.  Su situación, su posición socio-económica está dada por el ser: ser indio, ser no-blanco.  Villca pierde todo lo que posee a manos de su comadre y de las autoridades, que confiscan sus animales a través de un decreto especial.  Es solamente cuando sus reclamos no hallan eco, cuando se ve en la miseria completa, destituido, sin voz, que se da cuenta de los universos distintos/paralelos del blanco y de su comunidad. Altiplano concluye con el regreso de los tres a la aldea, tras la sequía y a fin de reiniciar su vida allí.  El verde de los sembrados, la cosecha, dan esperanzas de algo mejor, por lo menos, en lo que a la subsistencia se refiere, dentro de la comuna.  El mundo de la aldea (indígena) y el del blanco, funcionan paralelamente.

521 Cualquier público
546 Español
650 NOVELA; LITERATURA; NARRATIVA; LITERATURA - BOLIVIA
850 Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional