![]() Marc 21 |
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001 | 17490 | |
003 | BAHAALP | |
005 | 03092020121255 | |
006 | $m | 03092020121255 |
082 | 860 | |
090 | P156h | |
100 | Palermo, Zulma; Müller-Bergh, Klaus; Serra, Edelweis; Perosio, Graciela y Verzasconi, Ray | |
$q | Zulma Palermo; Klaus Müller-Bergh; Edelweis Serra; Graciela Perosio; Ray Verzasconi | |
245 | Historia y mito en la obra de Aejo Carpentier | |
$b | Incluye portada | |
260 | Buenos Aires : s.e.; 1972. | |
$a | Buenos Aires | |
$b | s.e. | |
$c | 1972 | |
300 | 183 p. 22 cm. | |
$a | 183 p. | |
$c | 22 cm | |
490 | Colección Ramón Rocha Monroy | |
500 | $3 | 1 |
520 | La novela que estudiamos, pues, exhibe
en su textura una articulación diversa, donde el personaje central
es uno de sus componentes, es una clave que permite abrir esa
textualidad (tejido), en cuanto es alguien que tiene la
conciencia de contar o de hacer una obra a través de la
estrategia del diario, paralelamente en su misma conciencia de
evocación y proyección futura; dicho de otro modo, Los pasos
perdidos se constituye como obra en progresión mediante la
autoconciencia de evocar una historia, mientras (de)construye
su transcurso, es decir, da cuenta de situaciones en las que su
protagonista siente que ha encontrado toda la Historia
americana. La condición escritural del discurso
narrativo hace pensar, entonces, en sus rasgos de lenguaje, en
la medida que, a partir de ellos, se provoca o seduce al
lector, para abrir una brecha entre lo real y lo imaginario. El
montaje de la fabulación tiene una forma armónica, con líneas
de desarrollo perfectamente definidas y “esta confluencia de
estructuras narrativas, da a la novela un enorme abigarramiento
que se imbrica totalmente con el estilo barroco del autorâ€
(Palermo,1972: 91). La aparente disgregación del novelista,
desde la perspectiva anterior, en realidad cumpliría
acertadamente su propósito, en virtud de la búsqueda de un
lenguaje efectivo en su función comunicativa y estética, de
manera que se debe pensar en el trabajo consciente del autor para
producirlo. En Carpentier, ha dicho Carlos Fuentes en La nueva
novela hispanoamericana (1969), “el verbo vuelve a ser
atribución, y el nombre, fundaciónâ€.
Un valioso aporte hizo Alejo Carpentier al opinar sobre el
tema que abordamos, para lo cual se remite a su condición de
novelista latinoamericano. Según su apreciación, nuestros
novelistas deben partir por nombrar las cosas y luego hacerlas entrar
al mundo entero. No obstante, mucho más rica es su visión
sobre el origen de lo barroco americano, que no niega la
tradición europea: “Cuando llegaron los conquistadores a
México, ¿con qué se encontraron? con un arte completamente
barroco; es decir, un arte que no soporta los espacios vacíos y
que tiene necesidad de rellenar esos espacios con figuras
-para hacerlo, además, inteligible [...]. Hoy todos los
escritores latinoamericanos son barrocos por la forma de
trabajar el lenguaje, por las descripciones. Es lógico. La historia
está muy presente para nosotros, y hay cosas aún inexploradasâ€
(Carpentier, 1985: 247). Y vacío no es, claro está, lo que
encontramos en Los pasos perdidos, sino exuberancia múltiple de
sonidos, enormidad en la vegetación y la altura de los árboles,
transformaciones de los ríos casi en mar, una naturaleza que parece
jugar a desdibujarse en apariencias. |
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521 | Cualquier público | |
546 | Español | |
650 | LITERATURA; LITERATURA LATINOAMERICANA; NOVELA | |
850 | Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional |