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Este libro parece,
por sus ricas facetas, una joya prendida en el armiño níveo del Illimani, la
montaña madre. Es un clamor andino, innegable y puro: la historia legendaria
del sufrimiento criollo. En sus paginas parece leerse el signo del hado:
ciudad hecha para sufrir y para vencer, ciudad vigilante, atalaya de las
victorias, orgullo de la patria grande. No ha de asomarse a la pureza y a la
verdad de su tema, extraído de los históricos "diarios" del celebre
cerco, la demagogia desvalorizadora. Y no ha de asomarse con el avieso
intento porque este libro es, sin reserva, el mas bello canto a la grandeza
del alma de La Paz |