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En la primera parte el autor pasa revista a un gran numero de seres sobrenaturales que pueblan el mundo existencial de los andinos. Hace una distinción entre seres benéficos y seres maléficos, no sin advertir que la mayoría de estos seres tienen un carácter ambiguo, ya que presentan rasgos benignos y malignos. La segunda parte esta dedicada a la descripción minuciosa de los numerosos instrumentos rituales de que dispone el hombre andino común, para establecer por su propia cuenta y sin intermedio de los especialistas contacto con los espíritus benévolos y malévolos. En la tercera parte se extiende sobre lo que llama las "manifestaciones rituales", nos da una descripción sistemática de todos los ritos que se ejecutan en los Andes, sino que se limita a la presentación de algunos ritos particulares como por ejemplo los ritos de viaje ^ies |