Este informe no pretende hacer una análisis exhaustivo de la situación carcelaria de Latinoamérica, pero sí reflejar el conocimiento y la experiencia de quienes día a día trabajan por los derechos humanos de los privados de libertad en Argentina, Brasil, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, El Salvador, Honduras, Guatemala, México, Perú y Venezuela.
Los textos recopilados están llenos de informaciones y estadísticas, pero sobre todo de relatos y descripciones impresionantes, tanto por la crueldad de los hechos como por la humanidad de sus víctimas protagonistas frecuentes de las crónicas rojas de los diarios.