Este libro contiene cuatro estudios que se aproximan a la noción del Vivir Bien en Bolivia desde geografías distintas pero con un propósito similar: conocer las percepciones en relación a este concepto desde la realidad cotidiana de diversas regiones del país. La presentación de los trabajos va de lo indígena campesino-rural a lo urbano, a través de la siguiente ruta: Jesús de Machaca (provincia Ingavi, La Paz], San Ignacio de Mojos (provincia Mojos, Beni), La Guardia (provincia Andrés Ibáñez, Santa Cruz) y Jaihuayco (distrito 5 de la zona sur de la ciudad de Cochabamba).
En conjunto, los estudios confirman la diversidad cultural y geográfica de sentidos, percepciones y representaciones en torno al Vivir Bien en Bolivia. En este sentido, mientras el elemento constitutivo del Vivir Bien en el mundo indígena es, ante todo, el territorio -asociado a la identidad, la producción agropecuaria, la cultura y la comunidad- en los ámbitos citadinos se produce una transición de este concepto en función de los desplazamientos urbano-rurales, los vaivenes identitarios, el desarrollo urbano y el despliegue de un sinnúmero de actividades económicas de diversa índole.
En conjunto, los estudios confirman la diversidad cultural y geográfica de sentidos, percepciones y representaciones en torno al Vivir Bien en Bolivia. En este sentido, mientras el elemento constitutivo del Vivir Bien en el mundo indígena es, ante todo, el territorio -asociado a la identidad, la producción agropecuaria, la cultura y la comunidad- en los ámbitos citadinos se produce una transición de este concepto en función de los desplazamientos urbano-rurales, los vaivenes identitarios, el desarrollo urbano y el despliegue de un sinnúmero de actividades económicas de diversa índole.