Hubiera sido más exacto titular este libro "La moral de la antigua clásica". No pudiendo el autor -condición primordial- entrar en contacto directo con los textos, no hará ningún lugar en él ni a la India, ni a la China, ni a la Caldea, ni al  Egipto ni a la Judea. Por lo demás, las ideas morales de la Antigüedad Clásica, fundamentalmente helénicas, constituyen por si solas una materia bastante amplia, cuyo estudio ofrece, además la ventaja de que han sido elaboradas en doctrinas por la reflexión filosófica y desvinculadas de ese modo de la religión.