Noah Friedman-Rudovsky viene acompañando este proceso desde el año 2004, desde que las abarcas se desgastaban en los caminos vecinales de tierra y las asfaltadas carreteras buscando llegar a la sede de gobierno, para que los sueños de esos pies callosos y protegidos del frío por la tierra fértil de los valles y del trópico cochabambino, hagan escuchar su voz.
En este libro están las imágenes que registran el proceso de cambio y el orgullo de ser lo que somos y el hacia dónde vamos; es un camino sin retorno en el que los desposeídos ahora comparten el pan de la historia, para vivir bien.