Durante 1986, América Latina continuó recuperándose lentamente de la profunda recesión económica que ha afectado a la región desde principios de la década de 1980. La tasa de crecimiento del Producto Interno Bruto de la región paso del 3,5 % registrado en 1985 a cerca del 4 % en 1986. Las tasas de crecimiento de las distintos países, sin embargo variaron considerablemente.
Las estimaciones preliminares indican que el PIB experimentó un crecimiento del del 4 % o más en seis países, y declinaciones alrededor del 4 % en México y Suriname.
La economía mexicana la segunda de la región no logró mantener el ritmo de recuperación iniciado en 1984 y 1985. La caída de los precios del petróleo que se produjo a fines de 1985 y principios de 1986, dió como resultado una brusca disminución de los ingresos fiscales y las divisas de México.