Honrar a nuestros artistas es una obligación ineludible, más aún cuando su obra ha trascendido las fronteras nacionales por su importancia intrínseca y su proyección social.
En el caso de la trayectoria musical y artística de Alfredo Domínguez Romero que, a pesar del poco tiempo que tuvo para trascender su arte, no deja de impactar, al haber estado íntimamente ligada a la cuestión social que marcó con fuerza su existencia. En efecto, este gran compositor y artista plástico nació en Tupiza (Potosí) el 9 de julio de 1938 y falleció el 28 de enero de 1980, en Suiza, con escasos 42 años de existencia.