Entre 1492 y 1789 fechas arbitrarias que se han elegido para definir del horizonte de la así llamada "modernidad temparana" los europeos tuvieron muchas ocasiones de toparse con América como exploradores, conquistadores, marinos, comerciantes, aventureros, espías, experiencias de las cuales extrajeron enseñanzas y conclusiones bastante distintas y diversas de las que suelen rseñarse. Este libro procura analizar los procesos de dominio como eventos en permanente construcción, cuyo éxito no está señalado desde las iniciales intenciones de quienes formularon y escribieron los discursos legitimadores de aquellos^ies