En materia de seguridad y defensa, los países de América Latina y el Caribe tienen características distintas y enfrentan desafíos muy diversos. El crimen organizado y sus profundos impactos en términos de violencia y destrucción del tejido social son mucho más evidentes en los países de Centroamérica, la región andina y México, aún si sus redes de acci+on y corrupción se extendienden cada vez más hacia el sur del contienente.
Dado que ese avance está ocurriendo de manera bastante sileciosa, los países del Cono Sur y Brasil con excepción de Uruguay, no han sido particularmente activos en los debates sobre reforma a las políticas contra las drogas que se están dando en todo el mundo y sobre todo en las Américas.