La tradición más hegemónica y vigente de la ciudadanía indica que ésta es una condición de los individuos que se expresa en la relación Estado - Sociedad.
Refiere a la existencia de un orden jurídico-formal que exalta la condición legal e igualitaria de los individuos ante la ley, reconoce su pertenencia a una comunidad política representada por el Estado Nación y la vigencia de un régimen de derechos que resguarda su carácter de miembros de dicha comunidad.