Lejos de las ortodoxias cientificistas, el actual estado del conocimiento concede dentro de la producción intelectual tanta legitimidad al hecho de demostrar como al hecho de mostrar. La obra de Zabaleta se inscribe en este último y desde una postura fenomenológica nos muestra un punto de vista - su punto de vista de la realidad social. Sistematiza la vida cotidiana social de nuestro país desde la vida cotidiana individual. No es un punto de vista de sentido común de lo cotidiano, es el mundo de vida que discurre por filtros conceptuales utilizados por el autor con miras a descomponer la realidad a manera de caleidoscopio. En un interesante zopping social que aflora de la subjetividad del autor para desafiar la nuestra, aceptemos el reto y construyamos intersubjetividad.