Al respecto el autor se manifiesta que al fraile aún le es fácil recordar el pasado, pero difícil es lo de anti ayer, y entre sus recuerdos señala a un matrimonio de ricos, que habían comprado, muy barata y para uso personal el antiguo “torreon†en ruinas, pero refaccionado con la plata estatal, siendo monumento histórico, y aprestándolo “escombros†de anticuarios. De todo lo mencionado anteriormente señala que vivió a su casa bastante trastornado, por la falsa nobleza que da la plata, cuando esta es abundante, y por la vulgaridad de la pedestre imitación ancestral. Este Obispo Antonio Calderón es ya un viejo de a ochenta achacoso, tal vez ya muerto difunto: el anuncio de su sede vacante puede ser que ya esta navegando, pero quien sabe cuando llegar su noticia. Entretanto es necesario consagrar al Sucesor como obispo de de Santa Romana Iglesia, y como titulo para su ministerio pastoral de sucesor de los apóstoles. Asimismo el pone a continuación el testimonio de consagración del obispo quadjutor del obispado de Santa Cruz de la Sierra y recomienda poner en su lugar un obispo joven y de ánimo decidido, nuevo Jonás pero al revés, cruzando el maro océano, rumbo a las tierras del Virreinato Peruano Fray de Campo. También relata un poco sobre Fernando Campo de quien analizaremos dentro de poco, su año de noviciado en 1569, el franciscano, futuro obispo de Santa Cruz de la sierra con “residencia†en Mizque, habría nacido en los años ’50 del siglo XVI; seguramente no después del año de 1555, es todo lo que se proporciona sobre los natales de nuestro héroe Fernardino.^ies
DESCRIPCION | CONTENIDO |
Nº de control | 00008623 |
Autor | |
Título | |
Año | 2005 |
Páginas | p. |
Idioma | Español |
Resumen |
|
Materias | |
Ítem en Biblioteca | |
Ejemplares | 1 |