El análisis debe ahora ir más allá de la situación coyuntural y aprovechar las ventajas que el poder formal del Estado ofrece. El saber aprovechar la posibilidad de participar en los ámbitos de decisión y apropiarse de las herramientas que permitan diseñar políticas públicas en beneficio de las comunidades marginadas, es el reto que deben enfrentar los nuevos parlamentarios. Las demandas reivindicadoras deben ir ahora acompañadas de propuestas realistas, ejecutables y viables, que llevan el fortalecimiento y al desarrollo de los pueblos en general.^ies