En lo referente a las practicas funerarias que se introdujeron en el transcurso del tiempo, muchas y muy variadas denominaciones de origen aymara y quechua y castellano han aparecido. A esta gama de términos se añade un valor significativo, porque el cesto simbolizaba la placenta o el vientre materno preparado para el difunto, de esta manera el podía renacer, ya que la mayoría de estas estructuras presentaban cámaras interiores logradas por falsas bóvedas que presentan variantes, como lade la orientación de la puerta en deacuerdo a la cultura.^ies